Los primeros años (1617-1628)
Europa en el siglo XVII
Nova Europae Descriptio – Jodocus Hondius (Amsterdam,1619)
Corrían los primeros años del siglo XVII y España se encontraba inmersa en la Guerra de los 80 Años, un enfrentamiento comenzado en 1568, cuando Felipe II sucede a su padre, y las provincias del norte de Flandes lo rechazan como rey dando inicio a la guerra más larga y sangrienta que jamás ha habido en Europa.
En 1609 las provincias enfrentadas firman la Tregua de los 12 Años para reponer fuerzas, y es cuando Jean Curtius, industrial liejés proveedor de pólvora y municiones de los ejércitos españoles, se ofrece para construir una moderna fábrica de armamento en la península ibérica que garantice la autonomía en materia de defensa.
España, por entonces, sólo sabía hacer cañones de bronce, carísimos y poco fiables, y gastaba fortunas comprando a los ingleses lo último en armamento: cañones de hierro colado.
Así es como, en 1617, el empresario llega a la aldea de Liérganes, donde había una ferrería y excelentes canteros además de todo lo necesario para su proyecto: un río más que idóneo para aprovechar su fuerza hidráulica, cantidades industriales de mineral de hierro, abundante piedra caliza y extensos robledales, encinares y hayedos para hacer carbón. A pocos kilómetros, los reales astilleros de Colindres y Guarnizo y el puerto de Santander.
Finalmente, en 1622, el rey Felipe IV despachó el privilegio real que autorizó la puesta en marcha de los que fueron los primeros altos hornos de la península ibérica, un hito tecnológico de primer orden en la historia industrial de nuestro país.
Pero Curtius murió en 1628 sin conocer el éxito que alcanzaría su titánica empresa, una fábrica que contribuyó, con su actividad, a escribir la historia de España, Europa y América.